SAN MANUEL, MUNICIPIO DE TUBUTAMA, SONORA.
Por: Ing. Alejandro Espinoza Arroyo
El Rosario, Baja California
A 02 de Octubre de 2020.
Protegido bajo patente no. 1660383.
Entre 1969 y 1970, años en los que viví en San
Manuel, conocí entre muchas otras, a la familia Jiménez, principalmente a
Salvador, Refugio "Cuco", Bernardo, e Irene. Primeramente conocí, en
agosto de 1969, a Doña María Armida “Arminda” Jiménez Chávez, esposa de Ruperto
Celaya Bernal, y al primo hermano de ella, Salvador Jiménez Ríos, aunque
también a Refugio “Cuco” Jiménez Ríos.
En
las amplias platicas que con los Jiménez sostuve, supe que habían llegado de
Chihuahua a Sonora, sin conocer en aquél entonces los pormenores de su
migración a Sonora.
En
la entrevista que le hice a su hermana, Doña Rufina Jiménez Ríos, hizo las
siguientes relaciones
El
16 de marzo de 2018, tuve la oportunidad de conocer y de entrevistar, en su
casa de San Quintín, Baja California, a la señora RUFINA JIMENEZ RIOS, de 96
años de edad, hermana de Salvador, Bernardo, Irene, y Refugio, y prima de María
Armida “Arminda”.
Según
el decir de la señora Rufina, ella nació el 10 de julio de 1922, en San
Buenaventura, Chihuahua, cuyos padres fueron Juan Jiménez Delgado y Genoveva
Ríos.
Sus
hermanos fueron: Salvador, Refugio, Bernardo, Rodolfo, Irene, y ella, Rufina.
Sus
abuelos paternos fueron: Bernardo Jiménez, originario del Estado de
Aguascalientes, y Feliciana Delgado, nacida en Zacatecas.
Sus
abuelos maternos fueron: Bibiano Ríos, de Estados Unidos, y la tarahumara
Ezequiela Hernández, nacida en la nación Raramuri, de la alta serranía
chihuahuense.
Los
hermanos de su padre Juan Jiménez Delgado, fueron: José (padre de “Arminda”),
Bernardino, Petra, y Maclovia.
Cuando
Rufina contaba con doce años de edad, que fue en el año de 1934, parte de la
familia Jiménez Ríos, salió desde San Buenaventura, Chihuahua, de donde
viajaron a Casas Grandes, Chihuahua, en dos carretas tiradas por mulas, y tiempo
después, viajaron con rumbo a San Ana, Sonora.
En
el viaje de San Buenaventura a Casas Grandes, su estancia en ese lugar, y el
viaje a Santa Ana, Sonora, transcurrieron un par de años.
En
ambos recorridos los carros los
conducían, uno su padre, y el otro, su tío José. Decidieron emigrar a
Santa Ana, ya que en aquél lugar vivía, desde hacía tiempo, su tío Bernardino,
hermano del padre de Rufina.
Meses
duró el recorrido, a paso de mula tirando las carretas. Venían las familias
completas de Juan, y de José, que entre adultos y niños eran casi una veintena
de personas. Viajaban durante el día, después de desayunar cargaban el campo a
las carretas, y proseguían el viaje por unas siete horas, paraban para preparar
sus alimentos, en cocinas de campo que acondicionaban a ras de suelo,
utilizando la sombra de algunos árboles, o las corrientes de algunos
riachuelos, donde también se bañaban, y lavaban sus ropas.
Por
el camino, con el fin de que los alimentos no escasearan, cazaban tantos
conejos, liebres, codornices, palomas, como podían, y en ocasiones venados.
Aprovechaban también los frutos y bayas silvestres.
Después
de cinco largos meses de viaje, al fin llegaron a Santa Ana Viejo, y de ahí
pasaron al ejido “Peñasco”
Su
tío Bernardino Jiménez Delgado, era quien vivía desde años antes en el Ejido
“Peñasco”, cercano al ejido “El Claro”, en la zona rural de Santa Ana, Sonora,
en cuyos lugares sembraban trigo y algodón, con agua que derivaban del río;
siendo la razón por la que la familia emigró a Sonora, dado que ya Bernardino
se encontraba bien afianzado.
A
los años de estar viviendo y sembrando en el ejido “Peñasco”, Juan, su padre,
así como sus tíos, José, y Bernardino, fueron invitados por el griego Pedro
Pulos para que lo apoyaran en la cacería de zorros y coyotes en San Manuel, ya
que se dedicaba a la curtiduría de pieles exóticas.
El
griego Pedro Pulos vivía en Santa Ana, lugar donde se había casado con Carmelita
Cubillas, originaria del lugar.
Fue
a causa de la cacería de zorros y coyotes, que la familia Jiménez Ríos, cambio
su residencia de manera permanente a San Manuel, en cuyas tierras, ya para
entonces se habían iniciado los trámites oficiales y poblamiento, para formar
el ejido, donde pasaron a ser ejidatarios.
Su
tío José Jiménez Delgado, casó con Rosalía Chávez, hija de Ricardo Chávez, de
cuyo matrimonio, nacieron: Arminda, Ambrosio, Manuel, Guadalupe (h), Francisco,
y Alicia.
Juan
Jiménez Delgado, padre de Rufina, falleció, con alrededor de cien años de edad,
en el ejido La Sangre, Sonora, en casa de su hija Irene, casada con Ignacio
Valle; fue sepultado en Santa Ana, al lado de su esposa Genoveva Ríos, quien
antes había fallecido en ese lugar.
Su
hermano Salvador Jiménez Ríos, casó con Herminia Badilla; mientras que su
hermano Bernardo casó con María Socorro Celaya, hermana de Arsenio Celaya, y
oadres de Rodolfo, Gloria, y otros hijos; originarios del Sáric, Sonora, pero
radicados en el pueblito Ejido La Sangre, vecino de San Manuel…
Entrevista
a Don Ruperto Celaya Bernal, en el pueblito San Manuel, municipio de Tubutama,
Sonora. Año 1969 y 1970.
Los datos que se presentan a continuación, me fueron proporcionados por
Don Ruperto Celaya Bernal, y por su esposa María Armida Jiménez Chávez, en las
largas charlas que sostuvimos durante mi estancia en San Manuel, entre 1969 y
1970, siendo brevemente mejorados por María Teresa Celaya López, hija de
Santiago Celaya Bernal.
Otra
rama de los Celaya, fue la formada por Don Ruperto Celaya Ortiz, y Refugio
Bernal Félix, originarios de Atil, Sonora. Cuyos hijos fueron: Santiago,
Artemisa, Ruperto, Federico, Francisco, Jesús (h), Alberto, María del Carmen,
Manuel Carlos, Bertha.
De
ésta familia Celaya Bernal, Ruperto casó
con María Armida “Arminda” Jiménez Chávez, hija de José Jiménez Delgado, quien
en el viaje de Chihuahua a Sonora, en 1934, contaba con un año de edad, y había
nacido en Casas Grandes, Chihuahua.
Santiago
Celaya Bernal casó con María Dolores López Calixtro, del ejido La Sangre, cuya
familia vive en Mexicali, Baja California; Artemisa casó con José “N” de
Mexicali, Baja California, no tuvieron hijos; Jesús casó con Consuelo Méndez,
de Altar, cuya familia vive en Altar,
Sonora; Adalberto casó con Estela del
Toro, cuya familia vive en Chihuahua;
María del Carmen casó con Eulalio Soto,
cuya familia vive en California, Estados Unidos; Manuel Carlos casó Con
Concepción Figueroa Traslaviña, de La Reforma, Sonora, cuya familia vive en
Caborca, Sonora; Federico casó con Uvaldina Montoya Gaxiola, del ejido La
Sangre, Sonora; cuya familia vive en San Manuel; Francisco casó con Francisca
Figueroa Traslaviña, de La Reforma, cuya familia vive en San Manuel. Bertha
falleció soltera a la edad de dieciocho años, en lamentable accidente al ser
operada de las anginas, en Santa Ana, Sonora.
Fue
así como la familia Jiménez, llegada de Chihuahua, se relacionó genéticamente
con personas oriundas de Atil, San Manuel, La Sangre, Altar, El Sáric, y La
Reforma, Sonora, principalmente…
De
la familia Jiménez Ríos, sólo sobrevive Doña Rufina.
De
la familia Jiménez Chávez, sobreviven Ambrosio, y Guadalupe (h), por encima de
los noventa años de edad.
De
la familia Celaya Bernal, sobreviven, María del Carmen, Francisco, y Manuel
Calos, todos andan, a la fecha, por encima de los noventa años de edad.
Don
Ruperto Celaya Bernal, nació en Atil, Sonora, en octubre de 1923, falleció en
Santa Ana, el 9 de febrero de 1993.
Doña
María Armida, nació en Casa Grandes, Chihuahua, el 23 de mayo de 1933, y
falleció en Santa Ana, Sonora, el 4 de mayo de 2014.
Continuará
con entrevista a Rhode Dicochea Gaxiola...se tratará fe lad familias Dicochea y
Gaxiola asentados en San Manuel, La Cuchilla, y La Sangre.